miércoles, 24 de junio de 2009

EL MANTO BABILONICO DE ACAN

QUE TIENES DENTRO DEL MANTO DEBAJO DE TU TIENDA.
El manto babilónico que menciona Josué capitulo siete, parece ser que hace referencia entonces a babel, un manto de las llanuras del shinar, donde el hombre empezó a sentirse poderoso e independiente, un lugar donde el ser humano se olvido de su Dios creador y quiso ser el mismo un dios, un lugar donde nace la civilización, pero no una civilización bajo el gobierno y señorío del creador, sino una civilización que busca unirse para llegar al mismo cielo, al mismo trono de Dios y erigirse como dios. Este manto babilónico procedente de la llanura del sinar, podría ser hermoso por sus telas y colores, por el arte exquisito, pero es una evidencia del deseo del ser humano de auto gobernarse, auto sostenerse y desarrollarse por sus propios medios.
Podríamos pensar que este manto le trae malos recuerdos a Dios, pues no quiere entre su pueblo a nadie que no desee ser gobernado por El, que los saco de la esclavitud a la libertad, este manto recuerda que siempre existirá en medio del pueblo los deseos de la concupiscencia humana, codiciando lo que no debe, deseando agradarse así mismo antes que agradarle a su señor.
Si hubo confusión de lenguas cuando en la llanura del sinar el hombre quiso reemplazar a Dios, esa torre de la confusión es la evidencia que el hombre nunca podrá unirse para fines de adoración verdadera a Dios, luego, podemos concluir que Dios no desea, que debajo de las tiendas de su pueblo se guarden recuerdos, ya sean muy valiosos o poco valiosos, pero que al fin y al cabo son recuerdos de confusión, recuerdos de pecado, recuerdos de maldición, lo poco valioso como la plata frente a lo muy valioso como el oro, envueltos en recuerdos del lugar de la confusión, traen como consecuencia el desagrado de Dios hacia nuestros actos, no solo por querer ocultarlos y guardar esa codicia en el corazón, sino por el acto desobediente del ser humano, que debe mantenerse despojado y alejado de todo aquello que lo confunda en su corazón, de lo que llega a reemplazar el apego perfecto y voluntario al único Dios verdadero.
El manto babilónico, recuerdos de confusión y altivez del hombre, el oro y la plata metales preciosos que hacen sentir al ser humano poderoso por lo que tiene y no por lo que es, poseyendo estos artículos (recuerdos, poder y posesiones) el ser humano olvida que eso no es lo que garantiza su sostenibilidad para el futuro, llega el ser humano a pensar que al tenerlo todo materialmente, puede comprar o negociar el futuro con el creador, pero nada más alejado de la realidad, cuando el hombre cree que lo tiene todo, habiendo desagradado a Dios, entonces lo habrá perdido todo, pues sino tiene a Dios de su lado y al frente de todo lo que hace, la derrota es más que segura, y las consecuencias de guardar como base y fundamento de la vida, el manto, el oro y la plata, solo le podrán asegurar que verá la espalda de Dios alejándose, pues Dios no sigue con su presencia a nadie que tome para sí, lo que él ha determinado que debe destruirse completamente, pues solo así, garantiza que su pueblo estará libre de todo recuerdo genético, de auto gobierno, auto sostenimiento y desarrollo por sus propios medios, entregándole a Dios la responsabilidad de gobernar, sostener y guiar a su pueblo hacia la victoria.
¿Por que acan escondió debajo de su tienda el anatema?, lo maldito, la prueba de la desobediencia al mandato divino. Es tan importante comprender la magnitud del significado de la tienda para cada familia de Israel, la tienda representa la familia completa, la tienda es el lugar de habitación, dentro de la tienda esta la familia, si alguien entra a la tienda entonces está entrando a la familia, por eso, para Cristo era tan importante entrar a cada tienda, a cada casa, vemos la importancia de las tiendas en el campamento de Israel, se organizaban alrededor del tabernáculo por tribus y las tribus por tiendas, se podría decir que la presencia de Dios estaba en medio de las tiendas, por consiguiente estaba en medio de las familias.
Tener la presencia de Dios en medio de la tienda, es una bendición demasiado grande, pero a su vez, es una responsabilidad igual de grande. Al estar la presencia de Dios en medio, todo lo que sucede alrededor afecta la presencia de Dios que está en medio, y lo que está debajo de la tienda, es decir debajo de la tierra, sería el fundamento, entonces se puede entender que cuando la presencia de Dios está en medio de la tienda, no puede haber otro fundamento, no puede existir nada mas en medio o debajo de la tienda, solo la presencia de Dios, por eso, cuando acan escondió lo maldito debajo de su tienda, estaba enterrando dentro de su familia la maldición, pues estaba colocando otro fundamento en medio y dentro de la tienda, eso nos podría explicar porque Dios se sintió tan enojado con el pueblo, si una familia va a la guerra, es como si todo Israel fuera a la guerra, si todo Israel va a la guerra, es como si una sola familia fuera a la guerra, cuando David fue a enfrentar al gigante, todo Israel estaba enfrentando al gigante, la victoria de uno solo, es la victoria de todos, la derrota de todos, es la derrota de cada uno.
Colocar debajo de la familia un anatema, es decir algo maldito, es colocar debajo de toda la familia una maldición, acan coloco debajo de Israel algo que Dios no quería que fuera el fundamento. Dios tiene un manto mucho más precioso y valioso para colocar como fundamento de cada familia, el manto de su presencia, son vestiduras preciosas, este manto debe estar dentro y en medio de cada tienda, la presencia de Dios debe estar debajo, dentro y en medio de cada familia, de cada tienda. A acan se le olvido de repente que el Dios que seguía, es el Dios dueño del oro y de la plata, tal vez le falló la memoria por un instante, se le hizo frágil el recuerdo de cómo salieron sus manos de Egipto, olvido de pronto que salieron llenas de oro, plata, piedras preciosas y riquezas, entonces olvidar de pronto, que quien pone el fundamento del pueblo y de la familia, es un Dios dueño de todo el oro y toda la plata, para reemplazarlo por unas pocas medidas de plata y un pequeño lingote de oro, es menospreciar las interminables riquezas que Dios tiene preparadas para su pueblo, Dios solo pide obediencia estricta a sus mandatos. Creo que acan olvido, que lo que debía enterrar bajo su tienda era la obediencia a la palabra de Dios, la fidelidad a Dios y la adoración, para guardarla y protegerla de perderla o regalarla a quien no debía.